Poesía para que mi alma no muera

 

"No digáis que, agotado su tesoro, de asuntos falta, enmudeció la lira: podrá no haber poetas pero siempre habrá poesía" - Gustavo Adolfo Bécquer.

POESIA PARA QUE MI ALMA NO MUERA

En mis días difíciles la poesía resulta un consuelo, un bálsamo para los momentos crudos de la realidad. Resulta que leyendo poesía me he encontrado a mí misma y a otros que aún creen en la belleza de las personas, en la sensibilidad, la creatividad y el amor que envuelve al ser humano.

Cuando escribo con la intención de un cuento, termino escribiendo poesía, así que he aprendido a darle rienda suelta a esos versos que comienzan danzando en la mente hasta que terminan materializándose en palabras rítmicas.

En el camino, un poco escabroso al inicio y sin ruta alguna, encontré a John Keats, lo encontré con la Bella Dama Sin Piedad y resulta que me enamoró, así que después de eso, a John Keats le siguieron algunos poetas y románticos más. Ahora sé que me gusta pasar el rato leyendo los versos de Gustavo Adolfo Bécquer, o William Blake.

Sin embargo, hay alguien que me conmueve y fantaseo con la idea de que, si hubiéramos coincidido en el lugar y tiempo, quizá hubiéramos podido entablar amistad. Es un amigo de otro gran amigo mío; resulta que leer la vida de Tolkien me llevó a conocer a Geoffrey Bache Smith, sus poemas me cautivaron e incluso escribí alguno inspirada en los suyos.

Aunque creo que, la poesía es otra forma de acercarnos a la Verdad, no solo embellecen con palabras todo aquello que sentimos en el interior, la mayoría de las veces con tanta intensidad, sino que también puede funcionar como camino conductor hacia la Verdad, aquella que nos revela los misterios más grades y nuestra propia identidad.

Por eso algunos Santos nos han dejado sus poemas como legado y herencia. También lo menciona Scott Hahn en uno de sus libros titulado La cena del Cordero, en las primeras misas de los primeros cristianos la liturgia tenía poesía.

 

La poesía expresa el sentir humano y todas las experiencias por las que vive el hombre, como ya lo menciona Robin Williams en La Sociedad de los Poetas muertos:

 “No leemos y escribimos porque sea tierno, escribimos y leemos poesía porque somos miembros de la humanidad, y la humanidad rebosa pasión, la medicina, leyes, administración, ingenierías son muy nobles y necesarias para sostener la vida, pero la poesía, belleza, romance, amor es por eso que vivimos”.

Además, con la poesía podemos encontrarnos con la belleza que hay en una vida cotidiana y sencilla, a mi modo de ver, también simplifica y explica con sencillez aspectos fundamentales en la vida de cualquier persona. Cuando no encontramos las palabras adecuadas para expresar lo que sentimos, lo que nos asusta, lo que nos inquieta o lo que amamos, ahí está el poeta dando su mano y el uso de su creatividad para ayudar.

Por eso escribo poesía, para expresar mediante unos versos todo aquello que explota con intensidad dentro de mí, aquello que me apasiona, escribo sobre aquello que me hace el corazón palpitar, es la forma que he encontrado para explicarlo, y ahora creo que es una buena forma de compartirlo.

"La imaginación no produce la locura, para ser exactos lo que forma o fomenta la locura es justamente la razón. Los poetas no enloquecen, los jugadores de ajedrez, sí." - G.K Chesterton.